Mauricio Macri asume como nuevo presidente del PRO

ESTE MARTES El expresidente se quedará hoy con la conducción institucional de la fuerza que creó en 2005. La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, disputa espacios de poder clave en el armado

Por primera vez en dos décadas de historia, Mauricio Macri asumirá hoy como presidente del PRO. Nunca antes había ejercido ese cargo. De hecho, había sido un rol un tanto ignoto, dado que el liderazgo del entonces jefe de Gobierno de la Ciudad y luego Presidente de la Nación eclipsaba cualquier discusión partidaria. De pronto, la situación interna cobró relevancia y todas las figuras políticas del espacio se mostraron interesadas por ocupar lugares importantes del comité amarillo.

 

El partido tiene elecciones internas y el plazo legal establecido por la Justicia electoral para presentar las candidaturas es la medianoche de hoy. Se renuevan presidente, dos vicepresidencias, titular de la Asamblea, la secretaría general (elegido por el Consejo), 25 consejeros y vocales. Patricia Bullrich, actual presidenta, es quien ofrece resistencia y puja poder interno. Horacio Rodríguez Larreta, en cambio, decidió correrse de la cuestión partidaria y no participará. María Eugenia Vidal, otra de las figuras de peso en el PRO, se mueve en esta ocasión en sintonía con Macri, aunque busca conservar autonomía.

 

La elección de las autoridades del PRO cobró tanta relevancia que también están interesados en participar referentes parlamentarios como Cristian Ritondo o Diego Santilli. Idénticas preferencias manifiestan los tres gobernadores del partido, Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Jorge Macri (CABA) y Nacho Torres (Chubut), así como intendentes de peso como Soledad Martínez (Vicente López), Guillermo Montenegro (Mar del Plata), Ramón Lanús (San Isidro) y Diego Valenzuela (Tres de Febrero).

 

Para terminar de ultimar detalles del armado de la lista, ayer hubo una reunión clave en el PRO. Se juntaron Pablo Walter y Juan Pablo Arenaza, armadores políticos de Bullrich, con Fernando De Andreis y Humberto Schiavoni, en nombre de Macri. Buscaron destrabar asperezas con la idea de presentar este martes una lista unificada.

 

Bullrich, ministra de Seguridad de la Nación, presiona fuerte para que Macri no tenga un control absoluto del PRO. Pretende lograr la incidencia suficiente como para que el partido se mantenga como aliado estratégico de Javier Milei. Si bien Guillermo Francos, como ministro del Interior, articula con gobernadores y dirigentes múltiples para tejer lazos de gobernabilidad, la funcionaria también tiene un rol político clave que lo ejerce en las sombras. Públicamente, concentra su agenda en los temas de su área de gestión. Pero habla a diario con Milei, todo el tiempo, y las conversaciones tienen alto contenido político.

 

Con quien habla cada vez menos Bullrich, es con el propio Mari. Las interlocuciones son contadas y ateridas. La relación entre ambos atraviesa un momento de tensión de difícil resolución. Por eso, el bullrichismo pujará hasta última hora por espacios de poder dentro del PRO.

 

Es un hecho que Macri será presidente. El resto de los lugares aún se discuten. Hay un consenso para que Soledad Martínez sea la vicepresidenta 1°, pero aún no está definido.