Altos niveles de descomposición social en Argentina

NUNCA TAN ELEVADOS
Según Alejandro Finocchiaro, este Gobierno abandonó todo diseño real de política pública.

Pobreza en la Argentina. Foto: NA.

Según Alejandro Finocchiaro, el Gobierno abandonó todo diseño real de política pública de la promoción social, para pasar a tercerizar el gerenciamiento de los recursos destinados a los sectores más castigados por esta situación, tan inédita como desastroza.
De acuerdo a lo expresado por Finocchiaro, así como este Gobierno abandonó al mundo del trabajo y la producción, a la educación, a la seguridad, también dejó de lado la política social.
Esta situación es inédita porque nunca atravesamos una crisis de esta escala sin un Gobierno verdadero. Desastrosa porque los niveles de descomposición social nunca han sido tan altos en la Argentina.
Frente a esto, el desvío de los recursos públicos hacia personeros del poder generan la necesidad de varias reflexiones urgentes.
Abandono de la responsabilidad del Estado. Les resta sentido a las áreas específicas de los tres niveles. Les vacía la caja y el sentido. La construcción de un poder paralelo, para-estatal, del que emanan referentes claramente antidemocráticos.
 

Compleja coyuntura
Personeros que amenazan, condicionan, extorsionan y obturan a las autoridades legítimamente al frente de las reparticiones. Personeros que nadie ha elegido y que tienen enorme poder. Manejan millonarios recursos, la calle y, lo peor de todo, manipulan una nueva forma de esclavitud.
Es el paroxismo del clientelismo político y el cercenamiento de la libertad.
Es uno de los peores fracasos de este Gobierno. Probablemente el peor después de la muerte evitable de miles de argentinos por el mal manejo de la pandemia, otro hijo natural de los prejuicios ideológicos: haber creado kelpers en el continente, ciudadanos de tercera clase.