SANTA ROSA
Primitiva Maldonado es de Santa Rosa, tiene 73 años y le cocina a los bomberos que están trabajando en los incendios. “Como mamá estoy pensando en ellos”, dijo ya que varios de los miembros de su familia forman parte del cuerpo.
Doña “Primi” tiene una familia de Bomberos Voluntarios, su marido, sus hijos y ahora sus nietos se sumaron a esta loable profesión. Los que no van al campo de batalla se quedan a cocinar para los que fueron. “Lo que hacemos es mandarle la comida al mediodía o la noche y a la tarde le mandamos torta frita, porque a veces ellos no vuelven. Esta tarea no es de ahora, es desde siempre, mi hijo es bombero hace 17 años y siempre los ayudamos”, dijo.
“A veces ellos no vuelven y si el incendio es grande vienen otros de apoyo, a todos les tenemos que cocinar. A veces le hacemos arroz con pollo, empanadas, sándwiches de milanesa, todo depende de la cantidad que están porque tiene que rendir la comida", explicó.
La mujer se mostró angustiada por la situación actual. “Ya tuvieron otros años de mucha exigencia pero esa vez no fue tanto como ahora porque ahora se le suma la sequía”, dijo.
“Cuando suena la sirena yo no sé qué hacer, según cómo suena la sirena es lo que pasa y uno ya sabe. Como mamá estoy pensando en ellos siempre. Yo nunca me opuse a que hagan esto, es su vocación, siempre estoy pidiéndole a Dios por ellos y hacemos esto con mucho amor”.
“En estos días estuvo muy feo, son impresionante los incendios que hay, la mayoría son forestaciones o los aserraderos y los Bomberos corren riesgo. A veces el viento hace remolino y el otro día el fuego los rodeó”, contó. Por otra parte subrayó que la sociedad reconoce este trabajo y también colabora mucho.
(Jc)
