
La oficial ayudante Ailén Fernández y la cabo Melisa García Da Rosa patrullaban en la avenida Cocomarola, cuando otro automóvil que circulaba por el mismo lugar hizo seña de luces y las policías se detuvieron. En el otro vehículo, estaba la madre de la menor que les pedía ayuda.
Con su hija en brazos, bajó del automóvil desesperada y la policía acudió a auxiliarla. La niña presentaba serias dificultades para respirar luego de atragantarse con un “caramelo duro”, de acuerdo a lo dicho por su madre.
Según el parte oficial de la fuerza, una de las uniformadas, “apelando a sus conocimientos de RCP y primeros auxilios, practicó la maniobra de Heimlich (utilizada para casos de asfixia por atragantamiento) y la menor despidió el objeto en cuestión de segundos”.
El parte policial remarca que, en todo momento, las uniformadas actuaron bajo estricto protocolo sanitario. Inmediatamente, la nena fue hospitalizada por precaución y el examen médico no mostró ninguna lesión, por lo que pudo recibir el alta y volver a su hogar con su familia.
(Jc)